FormaUn excéntrico director de teatro se ha propuesto innovar la escena obligando a los actores a improvisar frente al público la trama de un cuento de Pirandello. Se trata de una historia de celos que transcurre en una localidad siciliana y donde el mundo de la ópera juega un papel relevante. (De hecho, Addio Leonora, título del relato, toma el nombre de la célebre aria de Verdi). A partir de este planteamiento se suceden numerosas situaciones y equívocos en un divertido juego de simulacros en que se funden y confunden ficción y la realidad capaz de hacernos entrever, siempre desde el característico humorismo del escritor italiano, los arcanos de nuestra incierta condición. Esta noche se improvisa la comedia es, por encima de todo, un exultante homenaje a ese juego de espejos enfrentados al infinito que llamamos teatro.